Entradas populares

lunes, 16 de febrero de 2009

Berta Kolteniuk: al ver la nieve recordé a mipadre


Algunas veces existe la idea de no tenerse ningún recuerdo, pero se consigue evocar el de mayor sonido y el más luminoso.

Berta Kolteniuk disfruta alargar centímetro a centímetro los latidos de la naturaleza, consigue que la nieve de Washington y sus esqueletos grises durante el invierno puedan mantenerse en la eternidad, a través de paneles de yeso, en los cuales inserta tela, madera y pinturas al óleo, todas reunidas mágicamente como en una burbuja de jabón.

“La primera vez que vi la nieve me acordé de mi padre, él me contaba de sus inviernos rusos. En México es impensable tal espectáculo helado”.

En la Ciudad de Colorado es donde tuvo el privilegio de presenciar la nieve.
“Me impactó tanto que empecé a trabajar con el yeso, quise reproducir la nieve. Como artista y pintora fue mi época monocromática, sólo con yeso trabajé.”

Berta llevaba ya en las venas los jardines ocultos del arte, desde la cuna oía tocar melodías clásicas en el piano de su hermano mayor.

“Estoy segura que la música es el arte más importante que existe. Te abre muchas partes del cerebro y del alma, es mi verdadera maestra”.

La memoria de Berta se incendia, consigue recoger esos recuerdos como pétalos de flores,

“Primero quería ser bailarina escuchaba música y bailaba, pero un día sostuve unas acuarelas y me sedujeron de inmediato”.

Creció y se formó como pintora en México, pero hace un par de años Berta viajó a Estados Unidos donde además de conocer la nieve, lograr contemplar la primavera y ver las flores brotar como una respiración con un amarillo luminoso, similar a un limón, ella encontró mirar el arte de otra manera y desarrollar su lenguaje personal como artista.

“Desde hace cinco años regresé de Los Estados Unidos y vuelvo a exponer mis obras en México, quiero mostrar a la gente mi trabajo realizado allá y cómo ha sido la transición en mis creaciones”.

Berta Kolteniuk está lista para generar visualidades, está de vuelta en México y presentará el próximo miércoles la exposición Chrome, recibe ese nombre por el título de la pieza más grande que se exhibirá en el Polyforum Siqueiros.

“Es una serie de cuatro columnas, hechas de madera, compuesta con paneles de colores diferentes. Están sobre expuestos, se pueden intercambiar de lugar, para realizarse un juego cromático. Una pieza que llevaba muchos años haciendo, por la cual recibí una beca para asistir a Washington y es la primera vez que la expongo en México”.

El trabajo de Berta es una experiencia de llevar a la realidad los sueños. Por eso logra situar en Chrome, las etapas creativas que ha tenido en los últimos diez años, desde una serie de dípticos, y polípticos hasta trasladarse a fuera del muro, en las selvas de la pintura donde utiliza líneas de madera pintadas con óleo y se cruzan poco a poco hasta convertirse en esculturas, donde se oye el silencio.

--Pero para la creadora de Chrome, ¿cuál es la belleza de esta exposición?--El color en sí. Me interesa en esta pieza sacar al color fuera del muro. Logren ser al mismo tiempo, pintura, escultura e instalación.

La pieza principal de la exposición son cuatro columnas que el espectador puede recorrer y sentir los diferentes colores que le han de llevar a una experiencia cromática.


--¿La experiencia cromática es el argumento para atraer los ojos del espectador?
--Los colore que uso son muy específicos, los mezclo. Me interesa que sean permanentes, y no cambien con el tiempo. Por eso lo trabajo a la manera tradicional aunque la propuesta no sea tradicional.


--¿En México se aprecia las creaciones en pintura y escultura?
--Volver de temporadas fuera de México es difícil, se necesita reinstaurar las conexiones, que te hagan reinstalarte en la escena en México. Es muy importante realizar esta muestra, porque soy artista independiente, es muy fácil que se pierda el hilo conductor de un artista.
Deseo mostrarle al público que durante los siete años de mi estancia en Estados Unidos, me la pasé trabajando, en las modalidades creación y montaje.
Mis trabajos se montaron en exposiciones, por ejemplo “Antártica”, se incluye en las piezas que se verán en la inauguración del próximo 18 de febrero, primero se presentó en el Instituto Cultural Mexicano, en San Antonio Texas. Desde hace cinco años que regresé a México y es el tiempo que me ha tocado encontrar un espacio donde exhibirla.



--¿Qué aprendiste en Estados Unidos?

--A mirar el arte de otra manera y desarrollar el lenguaje personal como artista.


--¿Qué viviste en Norteamérica para tener en México a una Berta más integrada?

--La soledad y la distancia. Esos dos elemento hicieron que me cuestionara. Fue muy difícil para mí replantearme el trabajo que venía haciendo. Sobre todo influyó en mí, el rigor con el que se trabaja. No es que no exista en México, pero en general, artistas y público, mantienen una posición más seria ante el trabajo. Eso me ayudó a definirme. Estados Unidos fue un viaje interior.


--¿Qué exigencias te planteas?

--Verbalizar mi obra, decir por qué la hago. No me quedo muda, cualquier pregunta puedo contestarla. Es necesario en el arte contemporáneo tener un lenguaje concreto para explicar las creaciones de uno mismo. Es una ayuda al espectador para descifrar la obra.


--¿Le tienes pavor al silencio?
--Me encanta, de hecho mi trabajo requiere de un silencio. Este permite concentrarse con uno mismo. Es necesario, para pensar primero hay que callarse. Para vivir una obra se debe hacer en silencio, ya después se puede hablar. Mi lenguaje es a partir de las emociones, manejo composición y materia, para que la gente lo obtenga en silencio y genere sus conclusiones.

--¿Cómo logras integrar la pintura con la plástica?

--Tuve interés de hacer escultura, me tomó muchos años, mi trabajo es pictórico. Me considero pintora. Las obras modulares fueron cobrando vida se fueron separando del muro, eso sí, sin perderse el sentido cromático.


--Berta Kolteniuk, si tuvieras la oportunidad de heredar un legado artístico a México ¿cuál sería?
--Si algún legado he de dejar es tratar de contagiar a la gente para que busque su propia luz. Y Este planeta no valga madres tan pronto.

No hay comentarios: